
Jóvenes indocumentados en todo el territorio estadounidense se están beneficiando de la Acción Diferida a favor de Quienes Llegaron en su Niñez (DACA, por sus siglas en inglés), proceso que permitirá temporalmente que algunos jóvenes elegibles asistan a la escuela y puedan trabajar sin el temor a la deportación. El Centro de Política para la Inmigración (IPC, por sus siglas en inglés) estima que cerca de 936,930 jóvenes indocumentados de entre 15 y 30 años podrían estar habilitados para aplicar por el nuevo programa.